La polémica ha envuelto la recomendación de la aerolínea Tunisair a sus azafatas de no usar ‘hiyab’ (pañuelo con el que las mujeres musulmanas se cubren el cabello) durante los vuelos, pues según un estudio propio produce alteraciones auditivas en situaciones de emergencia.
En un comunicado público, la compañía explicó que expertos médicos han constatado que el velo reduce la capacidad auditiva de las azafatas y por ello puede afectar su reacción en caso de una urgencia. Afirmación que comparte el propio ministro tunecino de Transporte, Mahmud Ben Romdhan, que declaró que el ‘hiyab’ «produce 30% de pérdida de audición».
Según Tunisair, “observaciones precisas realizadas por expertos en medicina aeronáutica muestran que, en una situación de evacuación bajo estándares internacionales, el velo impide que el personal de cabina perciba de forma óptima ciertos sonidos”. Y es que según la compañía, “en condiciones de alta presurización por la altitud no se puede garantizar la percepción óptima de ciertos sonidos (alarma de incendio en el inodoro, alarma de evacuación de alarma o una orden verbal emitida por el megáfono durante una evacuación)”.
Con información de abc.es