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La pérdida de audición y su relación con el equilibrio
El
oído interno transporta un líquido, la endolinfa, vinculado estrechamente con
la audición. Cuando este líquido no circula correctamente por todo el sistema
auditivo, se producen efectos sobre la estabilidad corporal.
El
oído, y en concreto la capacidad auditiva, afecta a muchas funciones del cuerpo
humano: por eso, en este artículo te explicaremos cuál es la relación
entre la pérdida auditiva y el equilibrio.
1.
¿Cómo influye la audición en el equilibrio?
Uno
de los órganos que mayor responsabilidad ejerce en la función de prevenir
al cuerpo humano de desestabilización es el oído.
El
oído puede dividirse en tres partes:
- El
oído externo conduce, por el canal auditivo, las ondas sonoras del entorno
hacia el oído medio.
- El
oído medio transmite las vibraciones sonoras por el oído interno, y éstas
son interpretadas por el cerebro.
- El
oído interno transporta la endolinfa, el líquido que cuida la relación
entre el oído y el equilibrio.
Para
un reparto equitativo en ambos oídos, la endolinfa se mueve a la par de
cualquier movimiento que realizamos con el cuerpo: de esta forma, dirige
al cerebro para que se encargue de mantenernos en una posición estable.
Este
líquido no deja de moverse para buscar un reparto equitativo entre ambos oídos.
Por eso, ante movimientos bruscos e inestables, la endolinfa también se
balancea y provoca esa sensación de mareo.
Cuando nos mantenemos completamente erguidos, la endolinfa se mantiene de forma estable en ambos oídos: esto envía una señal al cerebro de cuál es la posición que estamos manteniendo para mantener el equilibrio.
- ¿Cómo funciona el equilibrio?
El estado de equilibrio se rige por las leyes físicas de la gravedad. Es la función cerebral que nos permite mantenernos erguidos y, a la vez, mantenernos en movimiento sin llevarnos a la inestabilidad.
Una pérdida auditiva provoca que la endolinfa no pueda mantenerse equitativamente, al existir afección en uno o en ambos oídos. Por eso, el vínculo entre equilibrio y audición guarda una relación tan estrecha e imprescindible con la estabilidad corporal.
- Consecuencias de la pérdida de equilibrio
Aunque en muchísimos casos la pérdida de equilibrio es un claro síntoma de afecciones del oído interno, la pérdida auditiva no es la única afección puede vincularse al desequilibrio, relacionándose con patologías como la hipoacusia neurosensorial, el síndrome de Ramsay Hunt o síndrome de Ménière.
La pérdida de equilibrio puede ser un indicador de que la endolinfa no se está repartiendo de forma equitativa entre ambos oídos.
Los síntomas principales que puede provocar este la pérdida auditiva o patologías del oído son vértigos, aturdimiento y mareos, lo que, a su vez, puede provocar caídas que desembocan en lesiones físicas.
Revisar nuestra salud auditiva de forma periódica contribuye directamente a evitar esta inestabilidad física que está relacionada con la capacidad auditiva.